tengo.perdono.agradezco...quisiera
Tengo tu mano en mi boca, tengo tus pies en mi cabeza, tengo las entrañas revueltas por un par de cuchillos filosos de palabras.
Tengo las hojas caidas, tengo millones de cristales rompiendose en mi pupila, tengo las ganas del viento de estrellarme en la primera ola que se preste a ser surfeada.
Tengo pensamientos, acciones, sentimientos, sueños, realidades en esta bolsa de papas, tengo el nombre de un pájaro extinto, de un ángel caído, de una gaviota dormida, de aquella nube con forma de espina.
No tengo canciones con melodías pegadizas y letras vanales de mundos inexistentes pero vividos todos los días por tanta gente.
No tengo tu mano en mi mano, tu boca en mi boca, tus cristales enfocandose en los míos, ni tu tabla de surf.
No tengo contenido, ni concreción, ni una homogeneidad requerida para la aplicación a este puesto.
No tengo el coraje suficiente de enfrentar el peso de las consecuencias.
Perdono las heridas abiertas, las palabras punzantes, el revoltijo de situaciones no deseadas cada mañana.
Perdono la falta de cordura, de mesura, de límites, de ambición, de colores en el cielo.
Perdono no haber querido, no haber podido poder, no poder.
Perdono al mundo inconciente, a sus vaivenes nocturnos, a sus garras filosas y sus insectos caídos.
Perdono a todo aquel que quiera ser perdonado, por su pecado, por su castigo, por su mancha de sangre en la arena del camino.
Agradezco la falta de tacto, de mentira, de vueltas y vueltas sobre este mismo planeta.
Agradezco a los que se molestan en leer este escrito, a los que no le encuentran ningun sentido, ni a esto ni a la vida misma.
Agradezco vivir de esta manera en la que soy y no soy en un mismo momento, en la que las negaciones de la afirmado y las afirmaciones de lo negado son un constante dialectico de mi existencia.
Agradezco seguir existiendo, con todas mis mochilas, y barreras, y pasiones y malos entendidos.
No agradezco lo que nunca tuve y me gustaría haber tenido.
No agradezco que encuentres en mi escencia la de una niña malcriada y egoista.
No agradezco decir tantos no... asi hemos llegado hasta donde hemos llegado.
Quisiera recibir mis castigos, purificar mi conciencia, viajar lejos... hasta la Luna y aun así seguir viendote en la ventanilla.
Quisiera que mi cuerpo se evaporase y llegara hasta los pequeños poros de tu nariz, y me inhalaras, y me introdujeras dentro de tus sistemas, y tus salidas y entradas... quizás asi me entenderías, quizas asi, todos nos entenderíamos.
Quisiera mucha tolerancia, poca violenca, mucha pero mucha pasión, una pizca de sal y un nuevo corazón.
Tengo las hojas caidas, tengo millones de cristales rompiendose en mi pupila, tengo las ganas del viento de estrellarme en la primera ola que se preste a ser surfeada.
Tengo pensamientos, acciones, sentimientos, sueños, realidades en esta bolsa de papas, tengo el nombre de un pájaro extinto, de un ángel caído, de una gaviota dormida, de aquella nube con forma de espina.
No tengo canciones con melodías pegadizas y letras vanales de mundos inexistentes pero vividos todos los días por tanta gente.
No tengo tu mano en mi mano, tu boca en mi boca, tus cristales enfocandose en los míos, ni tu tabla de surf.
No tengo contenido, ni concreción, ni una homogeneidad requerida para la aplicación a este puesto.
No tengo el coraje suficiente de enfrentar el peso de las consecuencias.
Perdono las heridas abiertas, las palabras punzantes, el revoltijo de situaciones no deseadas cada mañana.
Perdono la falta de cordura, de mesura, de límites, de ambición, de colores en el cielo.
Perdono no haber querido, no haber podido poder, no poder.
Perdono al mundo inconciente, a sus vaivenes nocturnos, a sus garras filosas y sus insectos caídos.
Perdono a todo aquel que quiera ser perdonado, por su pecado, por su castigo, por su mancha de sangre en la arena del camino.
Agradezco la falta de tacto, de mentira, de vueltas y vueltas sobre este mismo planeta.
Agradezco a los que se molestan en leer este escrito, a los que no le encuentran ningun sentido, ni a esto ni a la vida misma.
Agradezco vivir de esta manera en la que soy y no soy en un mismo momento, en la que las negaciones de la afirmado y las afirmaciones de lo negado son un constante dialectico de mi existencia.
Agradezco seguir existiendo, con todas mis mochilas, y barreras, y pasiones y malos entendidos.
No agradezco lo que nunca tuve y me gustaría haber tenido.
No agradezco que encuentres en mi escencia la de una niña malcriada y egoista.
No agradezco decir tantos no... asi hemos llegado hasta donde hemos llegado.
Quisiera recibir mis castigos, purificar mi conciencia, viajar lejos... hasta la Luna y aun así seguir viendote en la ventanilla.
Quisiera que mi cuerpo se evaporase y llegara hasta los pequeños poros de tu nariz, y me inhalaras, y me introdujeras dentro de tus sistemas, y tus salidas y entradas... quizás asi me entenderías, quizas asi, todos nos entenderíamos.
Quisiera mucha tolerancia, poca violenca, mucha pero mucha pasión, una pizca de sal y un nuevo corazón.
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